sábado, 18 de abril de 2015

ESTOY CURADA

Y lo digo así, en mayúsculas y bien alto: ¡¡¡¡ME HE CURADO!!!

Tengo ganas de saltar, cantar, bailar, reír, llorar, abrazar, besar, gritar y amar. 

Después de unos días muy estresantes esperando resultados por fin hoy, 18 de abril de 2015, me han confirmado que todas las pruebas han salido bien. 

Cuando todo empezó recuerdo a Encarna mirándome con ternura y diciéndome que me armara de paciencia, que el proceso duraría un año. Y así ha sido. Faltan 4 días para el aniversario. 

En aquel momento yo no veía, no entendía nada, estaba muy triste, hundida y llena de rabia. Lo único que pasaba por mi cabeza era "por qué a mí, por qué a mi".

El tiempo fue pasando, integré la enfermedad en mi día a día y aprendí a convivir con ella. La curación se convirtió en mi objetivo y a la vez en el motor que me hacía avanzar. Despacito, sin prisa y siempre siguiendo las indicaciones de mi oncóloga. 

Poco a poco empecé a interesarme por lo que me estaba pasando y tomé parte activa en el proceso. Me informé, leí mucho, cambié mis hábitos alimenticios, hice ejercicio y creí en mí. Me acerqué más a los que me quieren, me dejé querer y aprendí que la vida es tan bonita que merece la pena vivirla intensamente.

El cáncer me ha quitado muchas cosas y ha puesto freno a una de mis mayores ilusiones, ser madre. Pero a la vez me ha demostrado que soy afortunada por ser tan fuerte, por tener tanta energía y estar acompañada de tanta gente que me quiere. 
La enfermedad saca lo mejor y lo peor de uno mismo y de los que te rodean, dejando al descubierto el amor incondicional y la verdadera amistad. 

A todos los que habéis caminado conmigo: GRACIAS. 

Gracias por cada mensaje, por cada llamada, por cada sonrisa, por cada brindis, por cada palabra de ánimo, por cada "tú puedes con esto y con mucho más". 

Cierro con este post un capítulo que ha durado un año, probablemente el más difícil de mi vida. 

Sin embargo el libro sigue abierto, porque ahora toca otra tournee de médicos para recuperarse de los efectos secundarios del tratamiento. Pero ese es otro capítulo y lo voy a dejar para otro día.

Hoy voy a saborear la vida.