Este cuerpo mio no deja de sorprenderme. Durante 3 meses de tratamiento semanal me despertaba y me pedía marcha. Corre, Forrest, corre. Y yo actuaba en consecuencia: nadar, correr, andar, montar en bicicleta...
Pero desde que empecé con la quimio naranja no hay tregua. Hay que decir que yo me siento fenomenal, y que salvo un par de días de mucho cansancio, tengo ganas de salir y moverme. Pero va a ser que no.
Ayer tuve que ir al hospital ooooootra veeeeez.
Tenía tos desde hacía tres días. Yo no le di ninguna importancia porque es la época de los resfriados y me entregué a la Couldina como hago siempre. Pero aquello empeoró y pasé a tener mocos en el pecho y flemas de esas verdes asquerosas. Mi madre y mi marido, que se han aliado para ser los aprensivos del trío "tengo cáncer de mama", insistieron en que fuera a urgencias por si era algo grave que me pudiera retrasar la penúltima quimio (la del jueves 18).
El diagnóstico fue bronquitis aguda y el tratamiento una semana de antibiótico y dos de un inhalador que cuesta la friolera de 83 euros, Espero que por ese precio por lo menos "coloque" un poco.
Pregunté si podía darme el jueves la quimio y me dijeron que sí. Y que además había llegado justo a tiempo para que aquello no se convirtiese en una neumonía.
Menos mal que fui al hospital. Gracias mamá, gracias Isam.
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